martes, septiembre 30

MONICA FIGUEROA- Hoy me necesitas

Obra:Eulogio Dìaz "Gorriones en un almendro"

Hoy me necesitas.
Haz cubierto tus ojos de nostalgia
y las làgrimas frìas, congelados,
lastiman tu piel, dejan heridas.
Esos surcos que la vida traicionera
marcò a fuego, sin piedad ni despedidas.
Hoy te necesitas.
Desde el fondo del oscuro equipaje
que pronuncian el pasado y
hacen eco eterno en las mañanas.
Desde la profundidad,
donde suenan las palabras y
las imàgenes distorsionadas, grises
regresando en pesadillas,
haciendose carne y dolor eterno.
Silencio con voces.
Oscuridad absoluta.
El grito del alma sofocada.
El pasado que es presente.
El dolor que atenaza, que aprieta,
que no deja lìmites ni segundos
para el abrazo que consuela.
para el futuro que no llega.
Hoy me necesitas.
Esta es mi alma. Mi espìritu,
Que se adhiere a tu espacio
y amorosamente restaña las heridas.
Te devuelve completo.
Gira a tu alrededor como el viento
que en continuos remolinos
despierta lo bueno.
Aleja lo malo.
Hasta que llegue esa tarde,
que tus ojos sean brillo y ternura.
Tus labios sonrisas.
Tu corazòn, muchos sueños.
Entonces, me alejarè despacio....
Seguirè el rumbo propio decidida.
Sabiendo que en tu nueva vida.....
Siempre tendràs mi compañìa

derechos reservados

domingo, septiembre 28

SHANA TOVA




"¡Cuán dulces son a mi paladar
Tus palabras, más que la miel en mi boca!
De Tus ordenanzas adquiero inteligencia;
por eso aborrezco todo camino de mentira."
(Tehilim / Salmos 119:103-104)


A mis amigos judìos
SHANA TOVA

viernes, septiembre 26

ALFONSINA STORNI-Espera

Obra: TANGO de Pilar Sala

He de darte las manos, espera, todavía
está llena la tierra del murmullo del día.

La bóveda celeste no deja ver ninguna
de sus estrellas... duerme en los cielos la luna.

He de darte las manos, pero aguarda, que ahora
todo piensa y trabaja -la vida es previsora-
Pero el corazón mío se esconde solitario,
desconsolado y triste por el bullicio diario.

Hace falta que todo lo que se mueve cobre
una vaga pereza, que el esfuerzo zozobre,
que caiga sobre el mundo un tranquilo descanso,
un medio todo dulce, consolador y manso.

Espera... dulcemente, balsámica de calma,
se llegará la noche, yo te daré las manos,
pero ahora lo impiden esos ruidos mundanos;
hay luz en demasía, no puedo verte el alma.

fin


jueves, septiembre 25

ORLANDO VAN BREDAM



No tengo otro problema en la vida que tu rostro

que me provoca insomnio

desazon

y ternura,

como un niño olvidado

en medio del oceano,

como un teatro vacio

despues de un gran estreno...

No tengo otra tarea en la vida que mirarte...

Tu rostro es el resumen de todos los que he visto,

la miel almacenada de todas las colmenas.

Tus ojos carceleros impiden que me acerque,

No tengo otro destino en la vida que olvidarte...

de lo contrario, amor

de lo contrario, cielo

voy a gastarte el rostro

y voy a recibirme

de cartògrafo en pieles,

de experto en ojos tristes.

(DE: Formosa. Argentina)


RAUL ROLFI- A veces


(Pintura: Marilyn Robertson)


A veces en las tardes,
el silencio se apiada de mi melancolia
y la borra de un golpe.

Todo lo que no fue,
se hace polvo en el aire.

Me recupera el tiempo de los sueños
me ciñe a su costado,
donde crece la fe,
y retorno al camino
donde el amor paso ya tantas veces
y no logre alcanzarlo.

Olvido por un rato.
Perdono.
Me libero.

Deshago con paciencia de artesano
el horizonte oscuro de unos años inutiles
y me voy de mi mano,
como quien se celebra,
en busca de esas cosas
que pueden habitarme todavia.

Por ejemplo,
una caricia a tiempo,
una voz que me nombre dulcemente,
alguien a quien le importe lo que guardo
debajo de la piel.

Que no haga trampa.
Que no me desconcierte.

Que invente para mi
la huella de una rosa
y amanezca conmigo.
Que mas puedo pedir?

(Argentina)

miércoles, septiembre 24

OSCAR EDUARDO CACERES- Te vi......


Te vi llegar.
Un rayo de luz azul te iluminò.

Y te conmoviste hasta morir.

Te conmoviste hasta vivir.

Te vì llegar.
Desnuda como invisible.
Mis ojos se deslumbraron
y no pude nada màs.


Te vì llegar.
Maquillada con la risa...

Aquella risa perdida
que me obligò a vivir,
que me conmoviò a morir.


Te vì llegar.
Asomando en mi pensar.
Solo un recuerdo perenne.
Me envejezco y nuevamente...
Te vì...

Marchar.

(de:RIO GALLEGOS)

martes, septiembre 23

EDUARDO CASTELLI- Soneto


Me importa el tiempo que pasas conmigo
cuando el aire se aquieta entre las hojas.
Me importa el manto que te presta abrigo
cuando la noche azul enfrìa sombras.

Me importa conocer en tus ausencias
la dulce y honda nostalgia de tu nido
como me importa ver en tu presencia
calentarse con luz tus ojos frìos.

Me importa, en fin, aquello que te importa:
la sangre, que martilla en tu garganta.
el aire, que tus manos alborotan,
y mi carne, al final, que se levanta,
se estremece, se eriza y se abalanza
bajo el càlido aliento de tu boca.
de: LOS ANTIGUOS

EDUARDO CASTELLI: Naciò el 6 de julio de 1951
en la localidad de Los Antiguos, Provincia de Santa Cruz.
Conduce programa radial con textos propios "La botella del
nàufrago" en FM Popular de esa Ciudad


lunes, septiembre 22

PERSEFONE: Una historia de primavera


(Escultura de Bernini)

Las diosas Démeter y Perséfone representaban para los pueblos de la antigüedad los poderes de la naturaleza, su transformación y la emergencia cíclica. En la antigua Grecia, el primer día de la primavera era el día en que Perséfone, prisionera bajo tierra durante seis meses, volvía al regazo de Deméter, su madre.

En el sureste de Europa hubo un tiempo en el que reinaba la eterna primavera. La hierba siempre era verde y espesa y las flores nunca marchitaban. No existía el invierno, ni la tierra yerma, ni el hambre. La artífice de tanta maravilla era Démeter, la cuarta esposa de Zeus.
De este matrimonio nació Core, luego llamada Perséfone. Se trataba de una hermosa joven adorada por su madre que solía acercarse a un campo repleto de flores a jugar. Un día, pasó por allí el terrible Hades con su temible carro tirado por caballos. Se encandiló con Perséfone y la raptó para llevarla al subsuelo, su territorio. Deméter, al no encontrar a su hija y con una antorchas en cada mano, emprendió una peregrinación de nueve días y nueve noches. Al décimo día el Sol, que todo lo ve, se atrevió a confesarle quién se había llevado a su hija. Irritada por la ofensa, Démeter decidió abandonar sus funciones y el Olimpo. Vivió y viajó por la tierra. Esta se quedó desolada y sin ningún fruto ya que, privada de su mano fecunda, se seca y las plantas no crecen. Ante este desastre Zeus se vio obligado a intervenir pero no pudo devolverle la hija a su madre. Es que Perséfone ya había probado el fruto de los infiernos (la granada) y por eso le era imposible abandonar las profundidades y regresar al mundo de los vivos. Sin embargo, se pudo llegar a un acuerdo: una parte del año Perséfone lo pasaría con su esposo y, la otra parte, con su madre.

Lo que este mito indica es que cuando Perséfone regresa con su madre, Démeter muestra su alegría haciendo reverdecer la tierra, con flores y frutos. Por el contrario, cuando la joven desciende al subterráneo, el descontento de su madre se demuestra en la tristeza del otoño y el invierno. Así se renueva anualmente el ciclo de las estaciones y así explicaban los griegos la sucesión de ellas: el otoño y el invierno son tristes y oscuros como el corazón de Deméter al estar separada de su hija. La alegría y la serenidad retornan cuando vuelve con ella, es decir, cuando comienza la primavera.

Deméter
Diosa de la fecundidad de los campos, la Madre Tierra, diosa del trigo, que proporciona el pan. En la mitología latina es Ceres, que está representada como una digna matrona que porta dos antorchas, símbolo de nacimiento y de luz.
Perséfone
Representa a la primavera. Para los romanos era Proserpina.
Zeus
Padre de los dioses, dueño y señor del cielo.
Hades
Dios de los infiernos que rige en el Tártaro o Mundo de los Muertos.


domingo, septiembre 21

MAURY MARGARITA- Margaritas


Te cantan los poetas
por tu fresca belleza
frecuentas todo el mundo
y abundas en mi tierra.
Adornas nuestros campos
tan àridos y extensos
halagando la vista
a extenuados viajeros.
Vives tan solo un año
`pero nunca pereces
por que el viento te siembra
y la tierra te mece
tus pètalos de nieve
guardan el sol al centro
y algùn enamorado
las deshoja al viento.-
(Puerto San Juliàn)


Pintura: Mis Margaritas
de: Ana Maria Garbarello

miércoles, septiembre 17

MONICA FIGUEROA- El momento

Cuando lleguè el momento.
Cuando te hayas ido.
En el instante temido y seguro
que la vida me cobre los sueños
nacidos en silencios compartidos.

Cuando la realidad empuje con saña
invadiendo los espacios queridos,
que construì pequeños, intensos,
dejando ansias contenidas
a la espera del pròximo inicio.

Cuando te alejes de mi vida
y no hayan instantes renaciendo
cual si fuera el màs dulce, el primero.
Con el tembloroso, infinito abrazo
que cobija al universo en un segundo.

Cuando ya no exista la paciente espera
que renueva su anhelo cada dìa
sabiendo que es ilusiòn, sueño, fantasìa,
es robar momentos de la vida,
enlazando en ellos mi destino.

Cuando la nostalgia cobre làgrimas
y estès en mì, aunque te hayas ido.
En la cadena luminosa de recuerdos,
como si la existencia compensara
esta vida real, cruel fantasìa.

Cuando llegue el momento.
Tendrè la marca tibia y silenciosa
de tu permanencia en mi vida.

Por que hiciste aflorar timidamente
lo mejor que en mì no conocìa.

Cuando te alejes de mi vida.....
no podrè volver a ser la misma.-
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Obra: Pintura naif
PILAR SALA (Argentina)




viernes, septiembre 12

SABINES JAIME- Boca de llanto




Boca de llanto, me llaman tus pupilas negras, me reclaman. Tus labios sin ti me besan. ¡Cómo has podido tener la misma mirada negra con esos ojos que ahora llevas! Sonreíste. ¡Qué silencio, qué falta de fiesta! ¡Cómo me puse a buscarte en tu sonrisa, cabeza de tierra, labios de tristeza! No lloras, no llorarías aunque quisieras; tienes el rostro apagado de las ciegas. Puedes reír. Yo te dejo reír, aunque no puedas.
MEXICO

NERUDA PABLO. El Mar

Necesito del mar porque me enseña:
no sé si aprendo música o conciencia:
no sé si es ola sola o ser profundo
o sólo ronca voz o deslumbrante
suposición de peces y navios.
El hecho es que hasta cuando
estoy dormido de algún modo magnético
circulo en la universidad del oleaje.
No son sólo las conchas trituradas
como si algún planeta tembloroso
participara paulatina muerte, no,
del fragmento reconstruyo el día,
de una racha de sal la estalactita
y de una cucharada el dios inmenso.
Lo que antes me enseñó lo guardo!
Es aire, incesante viento, agua y arena.
Parece poco para el hombre joven
que aquí llegó a vivir con sus incendios,
y sin embargo el pulso
que subía y bajaba a su abismo,
el frío del azul que crepitaba,
el desmoronamiento de la estrella,
el tierno desplegarse de la ola
despilfarrando nieve con la espuma,
el poder quieto, allí, determinado
como un trono de piedra en lo profundo,
substituyó el recinto en que crecían
tristeza terca, amontonando olvido,
y cambió bruscamente mi existencia:
di mi adhesión al puro movimiento.
CHILE
Pintura "MARINA" de JUAN CARLOS ALVARO

CASEIRO MARIA EUGENIA- Un deseo

Un deseo de ríos y palmeras
me tiembla entre los dedos
enredándose
en la voz del tiempo
tan cansado
que va nombrando las calles
donde nadie ha pasado llorando desde entonces

y está en juego el recuerdo de la piña
fermentándose en las venas,
en mis labios que desean el azúcar,
o ese tiempo del regreso
al amarillo de un girasol despierto
centro de fieltro
encrucijando tiempos.

(La Habana, CUBA)

Agonia.net aquí

jueves, septiembre 11

BUESA MIGUEL A.- Poema de las cosas



Quizás estando sola, de noche, en tu aposento
oirás que alguien te llama sin que tú sepas quién,
y aprenderás entonces, que hay cosas como el viento
que existen ciertamente, pero que no se ven...

Y también es posible que una tarde de hastío
como florece un surco, te renazca un afán,
y aprenderás entonces que hay cosas como el río
que se están yendo siempre, pero que no se van...

O al cruzar una calle, tu corazón risueño
recordará una pena que no tuviste ayer
y aprenderás entonces que hay cosas como el sueño,
cosas que nunca han sido, pero que pueden ser...

Por más que tú prefieras ignorar estas cosas
sabrás por qué suspiras oyendo una canción
y aprenderás entonces que hay cosas como rosas,
cosas que son hermosas, sin saber que lo son...

Y una tarde cualquiera, sentirás que te has ido
y un soplo de ceniza regará tu jardín,
y aprenderás entonces, que el tiempo y el olvido
son las únicas cosas que nunca tienen fin.

BUESA JOSE ANGEL- Mi corazòn no sabe lo que espera




Mi corazón no sabe lo que espera,

pero yo sé que espera todavía...
igual que aquella noche que llovía
y te besé bajo la enredadera.

Tu amor se fue como si no se fuera...
pues algo tuyo vuelve cada día...
y me dejaste la melancolía
de doblar el pañuelo a tu manera.

Esta noche de viento y lluvia fría
quiero pensar que si tu amor volviera...
al dejar de llover, ya no se iría.

Y estoy aquí, bajo la enredadera...
y como aquella noche en que llovía
mi corazón no sabe lo que espera.
-.-